DISCAPACIDAD INTELECTUAL Y SINDROME DOWN

Bienvenidos a un espacio dedicado al entendimiento, el aprendizaje y la inclusión. En este blog, abordaremos temas esenciales sobre la discapacidad intelectual, el Síndrome de Down y el Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH). Por lo que, encontraras información clara y accesible para educadores, padres de familia y todos aquellos interesados en entender mejor estas condiciones, fomentando un trato digno y una educación inclusiva para todos los niños. Mediante videos y consejos prácticos, aspiramos a contribuir a la creación de un ambiente más inclusivo y compasivo, donde cada niño sea apreciado y entendido plenamente.

Objetivo General:

Promover la comprensión, inclusión y buen trato hacia niños con discapacidades intelectuales, como el Síndrome de Down y el TDAH, mediante información accesible y educativa para padres y docentes.

Objetivos Específicos:

1. Brindar información actualizada y confiable sobre las características y necesidades de los niños con Síndrome de Down y TDAH.
2. Ofrecer  recursos prácticos para que padres y docentes puedan apoyar el desarrollo y aprendizaje de estos niños de manera inclusiva y empática.
3. Fomentar la empatía y la sensibilización en la comunidad educativa y familiar, contribuyendo a una sociedad más respetuosa y comprensiva hacia la diversidad y las diferencias individuales.

DISCAPACIDAD INTELECTUAL

Se caracteriza por limitaciones significativas en las habilidades de aprendizaje cotidianas; sin embargo, las personas con esta condición enfrentan dificultades para comprender, asimilar y comunicarse. Es una condición permanente, no una enfermedad, y se manifiesta por problemas en los procesos cognitivos que resultan en dificultades para comprender mensajes, responder a demandas, seguir instrucciones, recordar información o entender el lenguaje. Generalmente, la discapacidad intelectual se manifiesta antes de alcanzar la edad adulta y puede deberse a factores como enfermedades maternas durante el embarazo, complicaciones en el parto, infecciones o enfermedades durante la infancia, así como anomalías cromosómicas o metabólicas.

CARACTERÍSTICAS DE NIÑOS CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL

💥Algunas personas tienen dificultades para manejar problemas cotidianos, como la preparación de alimentos o el seguimiento de secuencias para lavarse las manos o cepillarse los dientes; por el contrario, otras dependen de alguien más para poder participar en actividades domésticas o rutinas diarias.

💥Algunas personas experimentan dificultades en el desarrollo de procesos o habilidades cognitivas básicas, tales como sentir, percibir, prestar atención o memorizar; por lo que, esto puede resultar en desafíos en los procesos cognitivos superiores, incluyendo el desarrollo del lenguaje y el pensamiento.

💥Muchos logran aprender en base a rutinas y estructuras para poder tener una secuencia lógica de lo que se debe hacer y de esa forma participar de las actividades en casa o en la escuela, incluso en el trabajo. 

💥 Algunas personas pueden aprender a leer, escribir y a realizar operaciones matemáticas sencillas y otras no; además, dependerá de la intervención y de las estrategias de enseñanza que se utilice con cada persona. 

💥Cada persona es única y amerita que se le enseñe a adquirir autonomía, capacidad de realización de actividades e independencia según sus posibilidades.

💥Las personas requieren de capacidades adaptativas y tener la posibilidad de lograr una vida con calidad y significatividad.

Entonces, esta discapacidad se caracteriza  por un funcionamiento intelectual limitado en diversos grados y que va a influir en las capacidades de razonar, resolver problemas y pensar de forma abstracta y creativa, por lo que esta discapacidad, tiene una relación directa con el aprendizaje y el rendimiento académico de un niño, joven o adulto pero, además; también va a afectar otros aspectos del desarrollo como el de la psicomotricidad, el lenguaje y la independencia personal. 

El desarrollo y la maduración en estos niños siguen un proceso más lento; aunque atraviesan las mismas etapas que cualquier niño considerado "normal", lo hacen con características distintivas; cabe recalcar que, la discapacidad intelectual no es una enfermedad mental; asimismo, se manifiesta antes de los 18 años y es permanente e irreversible, o sea, no tiene cura. Por otro lado, la enfermedad mental, que afecta el área emocional, afectiva y el comportamiento, puede ser curable con el tratamiento adecuado.

En términos generales, podemos decir que un niño con discapacidad intelectual puede ser detectado, no diagnosticado, por las siguientes evidencias:

💢Limitada capacidad intelectual, no logran los aprendizajes que niños no discapacitados de su edad si logran. 

💢Retraso psicomotor, problemas evidentes de coordinación muscular gruesa y fina y de equilibrio.

💢Comportamientos, no adecuados a su edad. 

💢Lenguaje expresivo limitado, a veces incomprensible.  

NIVELES DE LA DISCAPACIDAD INTELECTUAL

GRADO LEVE

No se distinguen de sus pares por características físicas y presentan déficits leves en conducta, lenguaje y aprendizaje; si se detectan y tratan a tiempo, pueden superar las expectativas académicas de primaria y ser completamente autónomos. 

GRADO MODERADO

Muestran rasgos físicos distintivos, como los que tienen Síndrome de Down; se identifican desde el nacimiento por retrasos notorios en lo intelectual, psicomotor, lingüístico y problemas conductuales; con detección y tratamiento oportunos, pueden alcanzar una independencia y autonomía razonables, y académicamente se benefician de un programa educativo enfocado en procedimientos y actitudes: lectura y escritura funcional, comprensión numérica y aritmética básica, y conceptos fundamentales de otras áreas. A partir de los 12 años, se les orienta hacia la formación laboral.

GRADO SEVERO

Su retraso en todas las áreas de desarrollo: intelectual, motora y de lenguaje son muy evidentes y las posibilidades de aprendizaje de habilidades elementales son limitadas. 

RASGOS O CARACTERÍSTICAS QUE PRESENTAN LOS NIÑOS CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL

Área Psicomotora 

💫 Torpeza en los desplazamientos, para caminar, correr, saltar, subir o bajar gradas, entre otros. 

💫 Falta de control postural relacionadas con el equilibrio, la coordinación muscular gruesa: lanzar y coger objetos. 

💫 Problemas de coordinación, visomotora fina y que influyen en actividades que exigen precisión. 

Área de Lenguaje 

💫 Aparición tardía del lenguaje. 

💫 Diversos trastornos de pronunciación que comprometen el lenguaje expresivo. Limitado vocabulario. 

💫 Pobre lenguaje interior. Lenguaje comprensivo poco desarrollado.

💫 A veces presentan ecolalia (perturbación del lenguaje que consiste en repetir involuntariamente una palabra o frase que acaba de pronunciar o de escuchar). Dificultad para mantener un diálogo o conversación.

Área Intelectual 

💫 Funciones intelectuales básicas como la atención, la concentración y la memoria presentan un desarrollo limitado. 

💫 Otras funciones intelectuales requieren de procesos de estimulación permanentes. 

💫 A veces presentan ecolalia. Dificultad para mantener un diálogo o conversación 

Área de Independencia Personal

💫 Carencia de hábitos personales relacionados con la higiene, el vestido y la alimentación. Otros hábitos, como el orden y la limpieza también están ausentes en la mayoría de niños. 

💫 El desplazamiento, el uso del tiempo libre y el manejo de rutinas son muy limitados. 

Área de Socialización 

💫 Los comportamientos al interactuar con los demás no siempre son adecuados o responsables.  

💫 Exhiben conductas caprichosas y a veces agresivas porque están acostumbrados a actuar así. 

💫 Conductas de cooperación y/o solidaridad no son permanentes.  

💫 Lo mismo sucede con el cumplimiento de reglas o acuerdos, como son las normas a nivel de aula o centro educativo.

MATERIALES ESPECÍFICOS PARA ESTUDIANTES EN CONDICIÓN DE DISCAPACIDAD INTELECTUAL

Los materiales educativos deben ser fácilmente manejables y disfrutables por el niño con discapacidad intelectual, facilitando así un aprendizaje más efectivo y sencillo; asimismo, es importante que estos  fomenten tanto la participación individual como la colectiva; por lo que, los materiales deben ser adecuados para el trabajo en equipo y es preferible formar grupos pequeños para que cada niño participe activamente. Por ejemplo, se pueden utilizar títeres de colores vivos y personajes atractivos, ya que son un medio lúdico y educativo que captura la atención en la narrativa y estimula la imaginación de los estudiantes. Es esencial que los materiales se seleccionen teniendo en cuenta las características y necesidades educativas de los estudiantes. Para aquellos con discapacidad intelectual, la selección debe basarse en el nivel de discapacidad, comenzando con materiales básicos e incrementando la dificultad progresivamente de acuerdo con las capacidades y progreso de cada niño.

Por ello, resulta valioso utilizar preferentemente  materiales visuales atractivos o táctiles con los que puedan experimentar, como medio para enseñar o reforzar conceptos, por ejemplo: 

• Ábacos, tableros semánticos. 
• Plastilina y herramientas para trabajarla.
• Témperas, lápices de colores, entre otros.  
• Bloques de construcción, según la edad y nivel.
• Materiales didácticos que emitan sonidos y sean fáciles de distinguir, tanto visualmente como por la textura.

Al igual que cualquier niño, los niños con discapacidad intelectual necesitan establecer rutinas diarias en sus primeros años para actividades como vestirse, asearse y comer, además de desarrollar buenos modales y valores. Se aconseja el uso de materiales secuenciales, como fichas que ilustren diversas situaciones cotidianas para que las ordenen correctamente. 

La estimulación sensorial es crucial para el aprendizaje, recomendándose recursos que estimulen principalmente la visión. Por ejemplo, se pueden usar fichas, carteles y dados con imágenes para ayudarles a asociar y aprender conceptos, reconocer partes del cuerpo, sentidos, números, letras y prendas de vestir. Los títeres y marionetas son útiles para expresar emociones como la felicidad, tristeza o enojo, narrar cuentos o historias que no pueden expresar adecuadamente debido a su discapacidad. Materiales que mejoren la percepción espacial, como fichas geométricas, y la plastilina y juegos moldeables, contribuyen al bienestar y la creatividad de los niños.

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SINDROME DOWN

El síndrome de Down fue descrito inicialmente en la década de 1860 por el Dr. John Langdon Down en Inglaterra, quien observó un grupo de personas con características faciales similares y variaciones en sus capacidades intelectuales. Durante el siglo XIX, se desconocía la causa del síndrome de Down. No fue sino hasta casi un siglo después de su primera descripción que se descubrió que es resultado de una copia adicional del cromosoma 21, razón por la cual a menudo se le denomina Trisomía 21. Esta copia extra puede llevar a problemas en el desarrollo cerebral y a la alteración del desarrollo intelectual típica en individuos con síndrome de Down, así como a ciertas características faciales distintivas. Sin embargo, también se ha reconocido que existe una amplia diversidad en las capacidades intelectuales y las características físicas de las personas con esta condición.

CARACTERÍSTICAS CLÍNICAS DEL SINDROME DE DOWN

💣A menudo está acompañado de diferentes problemas médicos, entre los que se incluyen cardiopatías congénitas, atresia duodenal, pérdida auditiva, problemas oftalmológicos, hipotiroidismo, demencia de inicio precoz y leucemia.

CARACTERÍSTICAS INTELECTUALES 

CARACTERÍSTICAS EN LAS HABILIDADES FÍSICAS

CARACTERÍSTICAS EN LAS HABILIDADES COGNITIVAS

"Más que un cromosoma extra, tienen un amor y una alegría que multiplican. Abre tu corazón y descubre la belleza de la diversidad en cada sonrisa."

TRASTORNO POR DÉFICIT DE ATENCIÓN CON HIPERACTIVIDAD 

¿Qué es y cuáles son sus síntomas?

Es un trastorno que se caracteriza principalmente por síntomas de inatención, hiperactividad e impulsividad.

El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es una alteración de la función ejecutiva, término que engloba muchas capacidades (atención, memoria, etc.) necesarias para realizar tareas fundamentales en el funcionamiento cotidiano como: atender, planificar y organizar los distintos pasos para conseguir un objetivo, reflexionar sobre las posibles consecuencias antes de hacer o decir algo, inhibir la respuesta inadecuada y cambiarla por otra más apropiada, entre otras.

Es el trastorno mental más frecuente en edad escolar (6-12 años), y de los más frecuentes en la adolescencia.

Los síntomas de inatención son:

1. No prestar atención a los detalles (por ejemplo, a los signos en las operaciones matemáticas, a los enunciados de los ejercicios o a la ortografía) lo que provoca que se comentan errores por descuido o por no fijarse bien (como ponerse la camiseta al revés o equivocarse en tareas que realmente sabe hacer).

2. Dificultades para mantener la atención, por lo que sobreviene el cansancio o aburrimiento en una actividad o juego al poco tiempo, cambiando frecuentemente de actividad.

3. Dificultades para completar actividades, dejando las tareas o los dibujos a medias si alguien no lo supervisa.

4. Dificultades para organizarse y planificarse; por ejemplo, comienza la hoja de problemas por el ejercicio 5, o la deja para el último minuto y al final no le da tiempo a terminarla.

5. Evitar tareas que requieren esfuerzo mental, como los deberes, puzles o sudokus.

6. Perder cosas, como el material escolar, jerséis o juguetes.

7. Distraerse con facilidad, mientras el profesor da la lección piensa en el recreo, al oír un ruido corre a ver qué es, con frecuencia padres y profesores dicen que “está en su mundo”, o que “se le va el santo al cielo”.

8. Olvidarse de encargos o actividades; por ejemplo, olvida llevar los deberes a clase o traer a casa el libro del examen que tiene al día siguiente, u olvida para qué fue a su habitación.

9. Parecer que no escucha cuando se le habla directamente y hay que repetirle las cosas varias veces.

La hiperactividad consiste en:

1. Moverse continuamente en su asiento; cambios de postura, movimiento de pierna, “enredar” con las manos, tocarse la cara, hacer ruiditos con el lápiz.

2. Levantarse en situaciones en las que debería permanecer sentado: como en clase, en la mesa o en la iglesia.

3. Correr todo el tiempo, o subirse a alturas de forma inapropiada, por lo que es más propenso a sufrir accidentes y plantea problemas de disciplina.

4. Hacer un ruido excesivo, mientras realiza actividades, o juega (pega golpes en la mesa, da gritos, tira los juguetes, entre otros).

5. Hablar excesivamente, a veces rápido sin que se le entienda, por su dificultad para organizar sus ideas.

6. Con frecuencia los padres y profesores advierten que el niño actúa como si estuviera “activado por un motor” o como “si nunca se le acabaran las pilas”.

La impulsividad consiste en:

1. Responder y actuar sin pensar, responder incluso antes de que la pregunta haya sido formulada, hacer o decir lo primero que se le viene a la cabeza sin pararse a pensar en las posibles consecuencias.

2. Dificultad para esperar su turno, quiere ser el primero en la cola, el primero en utilizar un columpio, que le sirvan la comida “ya”, se muestra impaciente cuando pide algo.

3. Interrumpir las conversaciones o los juegos de otros. Por ejemplo interrumpe a sus padres cuando hablan por el móvil y a sus hermanos cuando juegan con amigos, o se mete en una conversación “de mayores”.

💝Muchos niños con TDAH presentan las tres características, lo que se denomina TDAH
combinado.

No es esencial para el diagnóstico que se presenten las tres características del TDAH, ni que estas tengan la misma intensidad. Algunos pacientes con TDAH principalmente muestran síntomas de inatención, conocido como TDAH de predominio inatento, y tienen pocos o ningún signo de hiperactividad o impulsividad. Otros pueden tener problemas de atención y ser impulsivos, pero no necesariamente hiperactivos o inquietos.

El TDAH se diagnostica con mayor frecuencia en varones (con una proporción aproximada de cuatro niños por cada niña).

En cambio, el TDAH de predominio inatento es más común en mujeres. Este subtipo puede ser problemático porque estas personas no suelen causar disturbios en clase (no son ruidosas, no se desplazan mucho, no distraen a otros, no discuten ni pelean), lo que puede llevar a que el TDAH pase desapercibido y esté subdiagnosticado en este grupo.

¿Cuándo se detecta?

Generalmente el TDAH se detecta en edad escolar (6-12 años), cuando los niños muestran los síntomas. Sin embargo, puede diagnosticarse antes (en edad preescolar) o después (en la adolescencia o la edad adulta).

Un niño con TDAH en edad preescolar puede manifestar los siguientes comportamientos:

1. Pegar a sus compañeros.

2. Tener una curiosidad insaciable.

3. Excesiva actividad, cayéndose o golpeándose con frecuencia (y haciéndose heridas, esguinces, fracturas…).

4. No acatar las normas.

5. Tener un juego vigoroso y “bruto”.

6. Presentar inquietud psicomotora (siempre en movimiento).

7. Parecer torpe (derrama y se le caen cosas, no por torpeza motora sino por impulsividad y por hacer las cosas “al tun-tun”).

8. Ser insistente y demandante con padres, profesores y compañeros de clase.

9. Tener rabietas si no se cumplen sus deseos.

Un adolescente con TDAH se puede manifestar por los siguientes comportamientos:

1. Hiperactividad fina (sensación de intranquilidad interna, movimiento incesante de

pierna, tiene siempre algo en la mano).

2. Los profesores se suelen quejar de que sus trabajos son “sucios” y “desorganizados” y de que no trabaja.

3. Su rendimiento es menor a su capacidad, principalmente porque no se esfuerza (evita el esfuerzo mental), no revisa posibles fallos (entrega los exámenes rápido, cuanto antes mejor) y escribe lo mínimo “para salir del paso”.

4. En clase necesita que alguien le apoye y le anime a seguir, no puede trabajar porque deja las tareas a medias.

5. Tiende a cambiar de amistades con frecuencia, y no tiene un grupo cercano.

6. Llegan a presentar problemas de conducta: faltas de respeto a profesores, actitud retadora y desafiante, incumplimiento de normas, entre otros.

7. Suelen involucrarse en conductas de riesgo como abuso de alcohol, nicotina o cannabis.

8. A veces también presentan síntomas depresivos (tristeza, autoestima baja, apatía, desmotivación) y síntomas de ansiedad.

Es crucial reconocer que es normal, y no necesariamente indicativo de TDAH, que los niños preescolares muestren hiperactividad o que los adolescentes se distraigan temporalmente por problemas en sus relaciones sociales. El TDAH debe considerarse cuando los síntomas de inatención, hiperactividad o impulsividad son persistentes y afectan significativamente la vida cotidiana, como las relaciones sociales y familiares, el rendimiento académico, la autoestima y las actividades de ocio.

"El TDAH no es una limitación, sino una forma única de ver y vivir el mundo; con apoyo y comprensión, cada mente puede brillar en su propio ritmo y color." ¡Dale play al video y descubre todo lo que podemos lograr juntos!

GRACIAS POR LEER ESTE BLOG, ESCRITO CON MUCHO CARIÑO